Entendemos las pérdidas afectivas en la dimensión más amplia del duelo. Para ello, se ayuda en que te enfoques en el tipo de pérdida y las herramientas que necesitas para trabajar en ella. Dándole su lugar a tu proceso de aceptación a través del tiempo y la confianza.
Es el sentimiento de pérdida, desapego o cambio de alguien o algo que amamos.
Construido con algunas emociones y pensamientos. Lo que experimentamos desde el cuerpo, influenciado por pensamientos y sentimientos, como por nuestro contexto cultural, los valores y las creencias.
Nos hace sentir diferentes emociones que pueden ser contradictorias y las pérdidas son experiencias que vivimos desde que nacemos.
Los tipos de pérdida incluyen Material, Relacional, Social, Evolutivo, Intrapersonal, Ambiguo y su impacto afectivo es personal e inmutable, la del individuo, que resuena en lo colectivo.
La vida es una pérdida continua, vivida como un continuum creado por el choque entre lo que viene y lo que se va.
Durante el proceso de terapia, nos enfocamos en el trabajo afectivo de la perdida y nos convertimos en un acompañante, teniendo en cuenta cómo eres. Como dije, las experiencias de dos personas, como sus personalidades son diferentes, no sanarán de la misma manera.